Hasta siempre PS3

Sony ha anunciado la defunción definitiva de su consola de sobremesa de anterior generación, la PS3, esta semana. Una consola que nació con una arquitectura muy arriesgada y muchas promesas, la primera de ellas sobre la longitud de su vida.

Sony prometió que la consola duraría, al menos, 10 años. 10 largos años en los que no habría que cambiar de máquina para estar al día con los últimos juegos. Al final esto no fue así ya que se asustaron y anunciaron y lanzaron la sucesora, PS4, cuando ésta acababa de cumplir su sexto año de vida. ¿Cuál fue el problema de este cambio? Pues que los mejores juegos que estaban en desarrollo para ella cambiaron de plataforma, con los problemas que eso presenta en tiempo y calidad final. Por ello hemos tenido que sufrir esa serie de retales que supone FF versus XIII, por eso el catálogo de PS4 es, básicamente, remakes de juegos de PS3 y por eso no hemos podido ver el verdadero potencial de la consola, como si vimos en PS2 con los magníficos Shadow of the Colossus, God of War 3 o Kingdom Hearts 2. Y si, es cierto que ahora está cerca de cumplir sus 11 años de vida pero todos sabemos que, cuando sale la sucesora, el lanzamiento de juegos se detiene, lo que lleva a la parada de la producción de la consola con el tiempo.

En cualquier caso no estamos aquí para criticar una consola que nos trajo muy buenos momentos. Más bien estamos para rendirle un pequeño homenaje ahora que deja de fabricarse, primero en Japón para, posteriormente, cerrar el grifo en USA y Europa.

Con esta consola hemos vivido muy buenos momentos. Ha sido una competidora más que digna de Nintendo Wii, no tenían nada que ver en cuanto a potencia y en muchas casas eran compañeras. Ha supuesto la "madurez" de Sony a la hora de copiar conceptos de la competencia. No tuvo ningún problema en copiar, lo primero, los gamertags con "logros", aquí trofeos, que implementó MS y que ayudan a darle una nueva vida a los juegos. Tampoco tuvo ningún reparo en sacárse de la manga los Move, una suerte de WiiMotes con los que quería competir con Nintendo (con erótico resultado). A la hora de copiar los sensores de movimiento tuvieron tantos problemas que se vieron obligados a sacar dos versiones del Dual Shock 3, el primero de ellos sin vibración. En definitiva, ha sido la consola que ha aglutinado todo lo de la competencia.

También nos trajo, de la manera más invasiva, la era de los DLCs, los parches post lanzamiento, los bugs como camiones que nos impiden acabar los juegos. Una nueva era de desarrolladoras caraduras que piensan que pueden hacer lo que quieran con el usuario. Lo que también trajo la muerte de la retrocompatibilidad, aunque al principio de su vida no era así.

Nos trajo por un tiempo la posibilidad de utilizar una consola de videojuegos para resolver problemas científicos complicados, instalando Linux, montando servidores con consolas o mediante las aplicaciones oficiales como folding@home.

¿Y cómo olvidar el momento en el que se descubrió El Fallo que habían dejado en los sistemas de protección del código ejecutado por la consola? Fue un momento memorable.

Pero si algo hace grande a una consola son los juegos y en PS3 hemos podido disfrutar de grandes joyas, tanto exclusivas como multiplataforma. Tiene un gran y envidiable catálogo, contando entre sus títulos con algunos de los mejores juegos de su Era. Los chicos de Eurogamer han hecho una buena recopilación, que suscribo completamente y que os dejo aquí colgada para que la disfrutéis.

Naturalmente no están todos los que son, pero si son todos los que están. Cada uno guardamos en nuestro recuerdo algún caso especial que podrá estar o no estar incluido en esta lista. Lo cierto es que han sido muchas horas agarrando ese mando con cuernos. De hecho aún le quedan horas que darnos. En mi caso sigue instalada y todavía le queda mucho tiempo antes de volver a dormir en su caja. La Pila de juegos sigue conteniendo varios ejemplares listos para ser jugados en ella.

Hizo un gran papel en la guerra de la séptima generación, quedando en un merecido 2º puesto. Una lástima que Sony, y también MS, se asustaran de lo que WiiU representaba porque en realidad nunca nació para luchar con ellas, eran ligas distintas. Pero de aquellos lodos vienen éstos barros y ahora el futuro se ve incierto en este mundo.

Por todo ello la recordaremos, por todo ello ¡Larga vida a PS3!