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[Primeras impresiones] Daemon X Machina

El Nintendo Direct del otro día nos trajo cosas interesantes, cosas medianejas y algunos juegos a 3 fps y con poligonos del tamaño de sandías que no tocaremos ni con un palo. Lo que nos dejó además es alguna que otra demo para probar lo que está por llegar, así que nos hemos lanzado de cabeza a comprobar si algunas de las posibles futuras compras merecen la pena. Comenzaremos con Daemon X Machina.


Cuando se anunció en el pasado E3, Daemon X Machina nos llamó la atención por su aspecto visual y sonoro. Inicialmente se nos daba un aire a Xenoblade Chronicles X, con sus robots gigantes, pero más acelerado, con más acción. Después de probarlo, sin embargo, no ha terminado de convencerme demasiado por varias razones.

La demo se compone de varias misiones y un breve tutorial. Los controles que se nos dan son bastante básicos: usar las armas de uno y otro brazo (la del izquierdo es un escudo), lanzar misiles, darse impulso, saltar (o volar, si lo mantenemos) y aterrizar. Supuestamente en el juego completo tendremos distintas opciones para personalizar nuestro robot, de tal manera que pondremos distintas armas y modificadores que ampliarán las formas de juego que aquí, por el momento son un tanto simples.


También resultan algo monótonos los enemigos. Es poco rato el que hemos jugado, cierto es, pero una de las cosas que vemos que puede llegar a ser un problema es la variedad de enemigos. Básicamente aquí tenemos tanques en el suelo y una especie de drones en el aire, aparte de algún "jefe" como un robot gigante u otro robot similar a nosotros. Cuando acabamos con ellos podemos recoger munición y nuevas piezas para nuestro mecha. Sabemos que la versión final tendrá muchos más, y los escenarios serán mucho más variados (a la vista está en el mapa), pero si nos deja la sensación de que tal vez se pueda llegar a hacer repetitivo.

A las misiones y a las modificaciones de nuestra maquinaria bélica accedemos desde un panel en un hangar de nuestra base. Entre mision y misión se nos va introduciendo en la historia que, de primeras, parece un simple hilo conductor entre misión y misión, por lo que no creo que podamos esperar que nos deslumbre en ese sentido. Además, por el momento lo que se ve son diálogos tipo chat y no animaciones, algo que personalmente no me termina de agradar pese a ser habitual en cierto tipo de juegos.


En lo visual también tenemos nuestras dudas. El aspecto general es francamente bueno, sin duda, pero lo que nos falla es la cantidad de cosas que hay en pantalla. Tiene sentido que siendo una persona que controla un robot gigante (a la persona también se la puede controlar y luchar con ella, por cierto, aunque con unas capacidades de lucha más disminuidas) veamos una mira, el mapa, una especie de fijación de objetivos, el chat en el que nuestros compañeros mercenarios nos hablan y los números de daño. Lo que ocurre es que esto hace que la pantalla este saturada en exceso y algunas cosas, como los dialogos de los compañeros, quedan demasiado pequeños.

Lo que no tiene ni una sola pega es la banda sonora, que apabulla tanto en los combates como en los menús. Como es obvio no basta solo con música para hacer grande un juego, pero suele ser uno de los puntos que más contribuyen a dar una experiencia completa. Personalmente no ha terminado de engancharme, pero estamos seguros de que va a gustar a muchos tanto por su experiencia jugable como por su aspecto visual. La mejor forma de ver si os convence: probadla un rato.

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